Dpto. de Música presenta este 8 julio proyecto de creación artística «Tonos Comunes»
El Departamento de Música de la UdeC, informa que este jueves 8 de julio presentará a la comunidad el proyecto de creación artística denominado «Tonos Comunes», el cual contó con el financiamiento de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo, y la Facultad de Humanidades y Arte.
El objetivo principal, según los responsables del proyecto, los académicos Fernando Lillo Moscoso y Rodrigo Álvarez Vidal, es “generar una obra musical dentro de un contexto minimalista, tomando como material el paisaje sonoro de nuestro entorno”.
El proyecto de creación artística cuenta con ocho obras en total, cuatro de cada uno de sus autores.
La actividad se realizará a las 15.30 horas vía Zoom:
ID Reunión: 892 1258 0267
Código Acceso: 324390
Sobre este trabajo, uno de los autores y académico del Departamento de Música, Rodrigo Álvarez Vidal, explica que la parte de Tonos Comunes, que son de su autoría, corresponde a cuatro piezas: (1) Parque Ecuador, (2) Foro UdeC, (3) Lluvia, (4) Plaza de Armas, y nacen desde la inquietud de plasmar paisajes sonoros de nuestra ciudad en piezas musicales con instrumentación y afinación tradicionales, y sobre un contexto estético minimalista.
«El procedimiento para la composición de las piezas fue grabar paisajes sonoros de lugares específicos de nuestra ciudad desde donde se extrajeron pequeños fragmentos que se transformaron en objetos musicales para la composición. Todos estos sonidos que se transformaron en objetos musicales son de fuentes naturales como el canto de aves, gotas cayendo, y sonidos de conversaciones humanas. Por lo que la naturaleza entrega el puntapié inicial para cada una de las cuatro composiciones de mi autoría», indica Rodrigo Álvarez.
Sostiene el académico, que «como ya se ha dicho, en el desarrollo del proyecto se pretende usar como material de composición a sonidos de fuentes naturales que están en nuestro cotidiano, estos sonidos corresponden al canto de gorriones para la pieza Parque Ecuador, goteras de lluvia para la pieza Lluvia, y conversaciones de personas para las piezas Foro UdeC y Plaza de Armas. Por lo que, a pesar de que los títulos de las piezas nos sitúan en un contexto urbano, el origen del sonido es una fuente natural».
«La estética sobre la cual se desarrolló el material musical corresponde al minimalismo, que como principio de “utilización de recursos mínimos” puede ayudarnos a reflexionar sobre el innecesario alto consumo de recursos que utilizamos en nuestro día a día. Esta forma de composición ayuda a desarrollar la creatividad a partir de recursos mínimos, dicho de otra forma, nos obliga a ser creativos con muy pocos objetos, analogía que, si llevamos a nuestro diario vivir, nos fomenta a reflexionar sobre qué es lo realmente necesario para poder existir en el mundo», informa Rodrigo Alvarez.
Por su parte, Fernando Lillo Moscoso, académico y director del Departamento de Música, señala que las cuatro obras del proyecto VRID “Tonos Comunes” que «he compuesto para esta iniciativa colaborativa, tienen solo un tema o motivo musical transversal a todas ellas, que aparecen en primer o segundo plano, según se escuche el discurso sonoro».
«Están basadas en entornos costeros, especialmente la península de Hualpén, lugar que tiene un atractivo que aún no he terminado de conocer. Se realizaron registros sonoros que fueron la base compositiva para los distintos escenarios que se plantean en cada uno de los temas. No es una interpretación obvia, puesto que en cada una de las obras es imposible – al menos en lo personal- separarme de elementos que siempre me han acompañado, como lo son el aprecio a las cosas – aparentemente- simples de la naturaleza, la vida que se puede observar, o el constante cambio y renacimiento de los procesos que observamos en ella y que nos obliga, en ocasiones, a volver a la introspección para lograr entender en nuestras propias palabras, algún fenómeno y al mismo tiempo, crear una obra sonora que represente lo propio y lo de los demás, tarea muy compleja por cierto», explica Fernando Lillo.
Agrega que «el entorno marítimo es la base estética fundamental para los temas, El Mar y el Hechizo de las Luciérnagas, Capitán Estrella, El Muelle de Ramuntcho y Rocoto Paraíso de Pescadores, fueron compuestas a partir de los registros sonoros de esos lugares ubicados en la península de Hualpén, presentes y ojalá futuros, donde espero se pueda seguir compartiendo libremente. En términos musicales, se basa en acordes o progresiones de uso común, tanto en música docta como popular, unidos todos ellos por tan solo un motivo melódico, a su vez fácil de retener y presente en toda la extensión de la obra».
Fernando Lillo, finalmente expresó su agradecimiento por el apoyo y confianza otorgada a este trabajo por la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo, como también a la Dirección de Investigación y Creación Artística de la Universidad de Concepción.
