Dr. Claudio Llanos Reyes inaugura año académico del Departamento de Historia UdeC con una potente reflexión sobre el trabajo y sus transformaciones

Con una charla que abordó la alienación, la humanización y la flexibilización del trabajo desde una perspectiva histórica, el académico de la PUCV dio inicio oficial al año académico 2025, en una jornada que convocó a autoridades, estudiantes y docentes de pregrado y postgrado de la Universidad de Concepción.
Con una importante asistencia de estudiantes de pregrado y postgrado, el pasado miércoles 30 de abril se dio inicio oficial al Año Académico 2025 de la Licenciatura en Historia y del Departamento de Historia de la Universidad de Concepción. La actividad fue encabezada por la destacada conferencia del Dr. Claudio Llanos Reyes, académico del Instituto de Historia de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, titulada “El trabajo: Alienación, humanización y flexibilización. Una historia desde los años 1970. Elementos de una agenda de investigación”.
La jornada se llevó a cabo en el Auditorio Burkhard Seeger de la Facultad de Química y contó con la presencia de autoridades universitarias, entre ellas el Director del Departamento de Historia, Dr. Sanyar Lagos Vigouroux; el Decano de la Facultad de Humanidades y Arte, Dr. Alejandro Bancalari Molina; el Director del Programa de Magíster en Historia, Dr. David Oviedo Silva; y el Director del Programa de Doctorado en Historia, Dr. Fernando Venegas Espinoza.
La actividad fue abierta por la Dra. Laura Benedetti, jefa de carrera de la Licenciatura en Historia y organizadora de la jornada, quien destacó que este tipo de instancias forman parte de una tradición que se remonta a 1958, cuando Julius Kakarieka dictó la primera clase inaugural del Departamento. En sus palabras, subrayó que “nos reunimos para reflexionar sobre la importancia fundamental de nuestra disciplina en la sociedad contemporánea y sobre nuevos problemas de investigación emergentes”. Benedetti instó a la comunidad a ver este año académico como una oportunidad para el compromiso intelectual y ético, señalando que “el conocimiento histórico nos dota de las herramientas necesarias para analizar, cuestionar y comprender las complejidades de nuestra realidad actual”. También enfatizó que la historia debe practicarse como un ejercicio de construcción comunitaria, apelando al “diálogo, el respeto y la tolerancia” como valores esenciales para una convivencia universitaria más justa e inclusiva.
En su conferencia, el Dr. Claudio Llanos presentó una propuesta de lectura histórica del trabajo estructurada en torno a tres ejes: la alienación, la humanización y la flexibilización. Su intervención se apoyó en una nutrida base documental, que incluyó informes oficiales, literatura crítica, testimonios y registros gráficos, para trazar un mapa complejo de los cambios estructurales que han afectado el mundo del trabajo desde la década de 1970.
Llanos inició su exposición recordando que “el trabajo es, a la vez, un problema histórico, conceptual, social, político y económico”, y que su estudio permite articular fenómenos locales con procesos globales. A partir de esta premisa, abordó el concepto de alienación como una condición persistente en contextos industriales cada vez más automatizados y despersonalizados, citando a Sheppard y Herrick para mostrar cómo la monotonía laboral no solo deteriora la salud física y mental de los trabajadores, sino que también incide en su disposición política, fomentando actitudes autoritarias y antisociales.
Posteriormente, desarrolló el ideal de humanización del trabajo, tomando como referencia las políticas del gobierno socialdemócrata de Willy Brandt en la Alemania de los años 70. Este proyecto buscaba mejorar las condiciones de vida de los trabajadores mediante una mayor participación, justicia social y rediseño del entorno laboral. Llanos advirtió, sin embargo, que muchas de estas propuestas fueron neutralizadas por resistencias estructurales, derivando en lo que Frieder Naschold llamó “racionalización empresarial subvencionada”.
El tercer eje de la exposición se centró en el proceso de flexibilización laboral, impulsado desde los años 80 por políticas neoliberales que debilitaron la estabilidad laboral, fragmentaron las relaciones contractuales y redujeron la soberanía del tiempo de los trabajadores. Contratos temporales, externalización y trabajo a demanda fueron analizados como síntomas de una desestructuración profunda del mundo laboral que, lejos de empoderar al trabajador, ha multiplicado su precariedad. Citando fuentes como la Gaceta Sindical y publicaciones del movimiento sindical europeo, Llanos explicó que esta transformación convirtió al tiempo flexible en una falsa promesa de libertad, resultando muchas veces en mayor inseguridad y subordinación.
La conferencia concluyó con una invitación a repensar el trabajo desde una perspectiva histórica, crítica y situada. “Todos trabajamos —señaló—, pasamos gran parte de nuestra existencia trabajando, y sin embargo, rara vez nos detenemos a pensar qué sentido tiene, cómo nos transforma o qué sociedad estamos construyendo a través de él”. Su intervención dejó resonando preguntas urgentes sobre la alienación contemporánea, la pérdida de control sobre el tiempo y la urgencia de reivindicar el trabajo como dimensión política y humana, en un mundo que —como advirtió citando a Günther Anders— corre el riesgo de transformarse sin nosotros.